Ya llevo tiempo sin escribir en el blog, pero hoy me siento un poco inspirado gracias a una afición que he adquirido recientemente: juegos de cartas con baraja francesa.
El hecho de haber llegado a este punto ha llevado su proceso, el cual detallo a continuación:
Todo empezó con mi curiosidad por los trucos de magia, con cartas, con otros objetos o incluso sin nada, como el mentalismo. Me compré el año pasado un libro con trucos de magia, la mayoría de ellos con naipes y, aunque se pueden hacer casi todos con cualquier tipo de baraja, lo común es utilizar una baraja francesa. Empecé comprándome barajas francesas para hacer trucos de magia, pero me faltaba algo para mejorar la presentación, entonces fui a compr un tapete. Yo quería un tapete totalmente verde, sin ninguna serigrafía, pero el único modelo que había en la tienda era uno que tenía las serigrafías para jugar al Blackjack y pensé en utilizar la otra cara que no tenía nada serigrafiado.
Ya que tenía un tapete de Blackjack, me vino la curiosidad de aprender cómo se jugaba a tal juego, y buscando por Google y Youtube aprendí a jugar. No voy a explicar como se juega, sólo lo voy a comentar resumidamente: al Blackjack se juega contra el croupier, y el objetivo es superar su jugada sin pasarse de 21. Cada carta tiene un valor y se suma el valor de cada una de las cartas que intervienen en la jugada. Se trata de un juego en el que las apuestas son parte esencial, ya que según quien gane (jugador o croupier) la cantidad de la apuesta va a parar a una u otra de las partes, incluso se puede pagar a razón de 3 a 2 en caso de Blackjack natural. Pues bien, para simular las apuestas decidí comprarme fichas de casino (no me gusta jugar con dinero real).
Pues llegó el momento en el que tenía cartas, tapete y fichas de casino, y además había aprendido un juego con baraja francesa, pero aun mi curiosidad fue más allá y vi que podría jugar también al poker con el material que tenía, aunque había un problema: no sabía jugar al poker. Así que hice lo mismo que con el Blackjack y aprendí a jugar gracias a Internet, concretamente a la modalidad Texas Hold'em, en la que cada jugador recibe dos cartas y luego se juega con cinco comunes para todos los jugadores.
Ahora, con el Poker, me faltaban contrincantes contra quienes jugar, ya que en el Blackjack puede jugar uno sólo, pero no es así con el poker. Busqué algún juego para PC con el cual pudiese jugar y encontré uno muy interesante llamado Poker TH, de distribución gratuita. Con Poker TH se puede jugar contra el ordenador, en red local o con jugadores de todo el mundo por Internet, y sin necesidad de registrarse (y con dinero ficticio); así que con este programa puse en práctica un poco lo que había aprendido en Internet.
Aun faltaba algo. Jugar con un programa en el ordenador estaba bien, pero quizás era un poco frío. Faltaba el hecho de manipular las fichas con la mano, el tratar de no expresar con lenguaje no verbal si la mano que se tenía era buena o mala y el poder conversar y reirse con los contrincantes; así que propuse a mis amigos reunirnos para jugar alguna partida y finalmente se jugó. La verdad es que la propuesta tuvo éxito y parece ser que he contagiado mi nueva afición a alguien más, de hecho hemos repetido la actividad. En esta segunda partida la cosa fue más improvisada, pues en lugar de fichas apostábamos garbanzos y granos de maiz.
La forma que tenemos de jugar es empezar la partida repartiendo el mismo número de fichas a cada jugador e ir eliminando conforme se van quedando sin fichas, hasta que uno se quede con todas. Sin utilizar dinero real, entendiéndolo como una partida al Monopoly, en la que gana el jugador que se ha hecho con todo el patrimonio en juego (si es que alguna vez se termina una partida de Monopoly), y también sólo con dinero ficticio.